En la sesión ordinaria de la cámara porteña, la iniciativa recibió 50 votos afirmativos, tres negativos y una abstención. Pero aún con la total aprobación de los legisladores, por encuadrarse en las normas denominadas “de doble lectura”, requiere de una audiencia pública y un segundo debate en el recinto para su aprobación final.
Este jueves la Legislatura porteña dio, este jueves, aprobación inicial a la ley que promueve que el Paseo del Bajo, la autopista inaugurada en 2019 para unir el norte con el sur de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, lleve el nombre del expresidente Raúl Alfonsín.
La iniciativa recibió 50 votos afirmativos, tres negativos y una abstención durante la sesión ordinaria y dio una primera sanción al proyecto que, por encuadrarse en las normas denominadas “de doble lectura”, requiere de una audiencia pública y un segundo debate en el recinto para su aprobación final.
El texto, que es impulsado por el legislador de la UCR Ariel Álvarez Palma, dispone que “se denomine Presidente Dr. Raúl Ricardo Alfonsín al viaducto que une la Autopista Dr. Ricardo Balbín con la Autopista Presidente Dr. Arturo Umberto Illia”. Para que esto suceda, en otro apartado del mismo expediente, se busca eliminar el nombre propuesto para la autovía en su concepción inicial.
En este sentido, la propuesta también contempla la derogación de la ley 1.198, que data del 2003 y estableció que la autopista proyectada para recorrer el Bajo porteño tenga el nombre de “Brigadier General Juan Manuel de Rosas”.
Se debe a que la por normativa porteña, la designación de calles o lugares públicos con nombres de personas no puede aprobarse antes de que hayan transcurrido diez años del fallecimiento de la figura a homenajear.
El expresidente Alfonsín falleció el 31 de marzo del 2009, por lo cual en 2019 se presentó el primer proyecto que buscaba darle la denominación a la autopista porteña, no obstante, la iniciativa no avanzó en la Legislatura por pedido del Gobierno de la Ciudad que adujo, por entonces, “cuestiones técnicas” para la ejecución.
En marzo pasado, el expediente fue nuevamente presentado y debatido entre los asesores de la Comisión de Cultura durante los últimos meses y el lunes fue despachado por los diputados al recinto.
En tanto, Ariel Álvarez Palma expresó que: “Bautizar con el nombre de Raúl Alfonsín a una de las obras más importantes que realizó la Ciudad de Buenos Aires en los últimos años es más que un merecido homenaje a quien fuera el Padre de la Democracia y un ejemplo para muchos de los que comenzamos a militar allá por los años ochenta”.
Por su parte, la legisladora del Frente de Todos María Bielli reafirmó su “acompañamiento de los proyectos que conmemoran nuestra vida democrática” y remarcó que “Alfonsín era un militante político que creía profundamente en la política como herramienta de transformación y ese es el punto de unión que tenemos”.
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